Así es como llamaría yo a Xi’an. Cuando íbamos a ir a china pedimos consejo y un conocido nos dijo que Xian solo merecía la pena por ir a ver los guerreros. Le hicimos caso así que cogimos los vuelos con el tiempo justo para llegar al medio dia a la ciudad, dar un paseo y a la mañana siguiente ir a ver los guerreros. Todo un error, desde luego.
La parte interna de las murallas alberga las torres de la campana y el tambor; tan típicas en las ciudades Chinas y algo mucho mas especial; su barrio musulmán.
La mezquita es el eje de un barrio en el que ha habido un choque de culturas. Es un edificio de estilo chino, con inscripciones en árabe en el que se llevan a cabo las oraciones según la ley musulmana.
Si alguna vez habéis estado en una ciudad árabe el olor a especias de sus calles y su bazar os traerán muy gratos recuerdos.
Extramuros se pueden visitar las pagodas del gran y pequeño ganso. Además de perderse por sus múltiples centros comerciales.
Eso si! uno de los días hay que reservarlo para ver los guerreros que son una autentica maravilla.
This is how I would call Xi'an. When we were going to China we asked a friend and he told us Xian was worth just to go and see the warriors. We listened and we took flight just in time to arrive at noon in the city, have a walk and the next morning go and see the warriors. All wrong, of course.
Inside the walls, we can see the towers of the bell and drum, so typical in Chinese cities and something much more special, its Muslim Quarter.
The mosque is the centre of a neighbourhood where there has been a clash of cultures. It is a Chinese style building; with Arabic inscriptions make it the perfect place for prayers according to Muslim law.
If you've ever been in an Arab city, the smell of spices and the bazaar will bring you good memories.
Outside the walls you can visit the pagodas of great and small goose. In addition to wander through its many shopping centres.
But don’t forget! one day must be booked to see the warriors, they are a true wonder.